“La urgencia de una transformación en el campo se hace palpable, la resistencia al cambio ya no es una opción viable.” De forma rotunda, Francisco Hernández, responsable de Desarrollo de Negocio de Sustrate AI, -compañía especializada en Inteligencia Artificial aplicada al sector agro- ha puesto sobre la mesa la situación del sector agroindustrial de nuestro país y la necesidad de que se adapte, de forma urgente, a las nuevas tecnologías para ganar rentabilidad y reflotar este sector que, además, es crucial en la economía del sur de España.
Directivos de empresas del sector agroindustrial y de nuevas tecnologías se han dado cita esta tarde en Sevilla en la jornada La Transformación de la Industria Agroalimentaria por la IA, un encuentro empresarial organizado por la Asociación de Empresarios del Sur de España, CESUR, en colaboración con Sustrate AI.
En este escenario, Francisco Hernández ha asegurado que la industria agroalimentaria española “se encuentra en una encrucijada crítica, enfrentando desafíos sin precedentes que amenazan su tradición y su futuro. Las presiones del cambio climático, la escasez de recursos, el aumento de los costos de producción y una competencia global feroz se conjugan en un panorama desolador. Estos obstáculos no solo comprometen la producción y calidad de los alimentos, sino también la cultura y el modo de vida que han definido la rica industria rural de España durante generaciones”, ha dicho.
Además, el directivo de Sustrate AI también ha afirmado que, frente a esta realidad inminente, “emerge una ola de innovación tecnológica como faro de esperanza”. “La inteligencia artificial se perfila como el catalizador de una revolución, ofreciendo soluciones tangibles que prometen revitalizar el sector. Con la capacidad de optimizar los procesos de producción, gestionar de manera sostenible los recursos y predecir patrones de mercado, la IA no es solo una herramienta, sino un aliado esencial en la reestructuración de la industria”. A lo que ha añadido que “este nuevo paradigma tecnológico promete no solo salvaguardar la viabilidad económica y la sostenibilidad ambiental de la industria agroalimentaria, sino también asegurar su supervivencia en el siglo XXI, manteniendo viva la esencia de la gastronomía y agricultura españolas”.
Por su parte, Juan Carlos Rubio, CEO de OGA, ha defendido de forma práctica cómo la IA y la optimización de procesos pueden ayudar, tanto de forma organizativa como económica, a mejorar la rentabilidad de las empresas de alimentación. En la ponencia Hibridación de Inteligencia Artificial e Investigación Operativa y aplicación efectiva a la Agroindustria, Rubio ha presentado cuatro soluciones desarrolladas por OGA para instaurar el riego inteligente, planificar las líneas de transformación optimizando el ciclo productivo, implantar una logística inteligente adecuada a los tiempos de maduración de los alimentos y otra, para el contratipado de productos químicos, todas de alto impacto en este sector.
“La Inteligencia Artificial es una tecnología de un potencial transformador tan grande como lo fue, en su día, la electricidad. Las empresas que no comiencen a explotar todas estas nuevas capacidades verán seriamente impactada su capacidad de competir en el mercado”, ha asegurado el CEO de OGA quien, además, ha añadido que “es necesario concienciar a los empresarios y responsables de tomas de decisión para que se adapten a esta transformación que está generando un gran impacto en todos los sectores, incluido el agroalimentario”.
Además, Marc Berbel Querol, Operations Manager en Canon España ha destacado cómo desde empresas tecnológicas como Canon “trabajamos para contribuir al desarrollo del sector agroalimentario a través de nuestros servicios para la optimización de la gestión de la información y la cadena de suministro, basados en herramientas de Gestión de Procesos de Negocio y en Inteligencia Artificial”. A través de Canon Information Management Solutions “contamos con soluciones que hacen posible automatizar y llevar un control exhaustivo de muchos de los procesos del negocio. De esta forma, se garantiza el cumplimiento normativo, por ejemplo, en lo que se refiere al nuevo Real Decreto de registro de contratos alimentarios y en la trazabilidad de toda la información desde su origen. Aplicando al sector los beneficios que hace posible la automatización de procesos logramos reducir el tiempo que los usuarios invierten en estas tareas, disminuyendo, a su vez, los posibles errores humanos a lo largo del proceso y permitimos que los responsables de las explotaciones agroalimentarias puedan, precisamente, dedicarse a desarrollar su negocio y su trabajo de la mejor forma posible y con los mejores resultados”, ha asegurado Berbel Querol.
La jornada ha contado también con una mesa coloquio en la que han participado Alba Aguilar, directora de Proyectos de Masur Agro; Juan Francisco Báñez, director general de Cuna de Platero; Lucía Valdivia, CFO en AG Olives; y Francisco Hernández, responsable de Desarrollo de Negocio de Sustrate AI.
En este foro, moderado por Pedro Carrillo Donaire, fundador de ec2ce, empresa especializada en I.A., se han abordado las aplicaciones directas que la I.A. les aporta en sus respectivos negocios, tales como los sistemas automáticos de captación de datos para alimentar los algoritmos de I.A., el uso del modelado predictivo para la toma de decisiones anticipadas que optimicen la cadena de valor agroalimentaria, el desarrollo de nuevas variedades, para la predicción de cosecha y de demanda o, incluso, para su uso en la gestión financiera y administrativa mediante soluciones de I.A. generativa.
Por último, los participantes debatieron sobre los distintos tipos de I.A. (numérica o de identificación de patrones) y sobre la necesidad de saber medir el retorno de la inversión en esta tecnología para obtener el beneficio esperado.