Elmya se ha consolidado como un constructor de grandes plantas fotovoltaicas de la mano de compañías como Enel, Iberdrola y Naturgy. La compañía sevillana logró en 2022 unos ingresos de 105 millones de euros, de los cuales el 90% procede de la construcción de parques. Junto a ello, también tiene una rama dedicada a las instalaciones eléctricas y una filial para desarrollar grandes proyectos renovables desde su origen, que ya tiene una cartera de tres gigavatios y es una de las grandes palancas para el crecimiento de la compañía.
Tras las buenas cifras que está registrando el sector fotovoltaico, la pandemia también ha afectado a su desarrollo. "La clave para superar las vicisitudes ha sido estar muy cerca del cliente y los proveedores, actualizar precios de forma permanente y ser muy transparentes en todos los eslabones de la cadena para que la volatilidad no hiciera inviables los proyectos", asegura José María Piñar, presidente de la compañía asociada a CESUR. Así mismo, Piñar apunta que "La crisis que ha generado la invasión de Ucrania ha acelerado todas las inversiones para la transición energética y España es esencial para que la UE pueda cumplir sus objetivos".
Las dificultades de 2021 y 2022 han forjado empresas más eficientes y ha acelerado cambios en el sector. "Hubo un tiempo en el que había una guerra de precios entre los constructores de proyectos 'llave en mano', ahora se apuesta por relaciones de colaboración de confianza y largo plazo". La firma alcanzó en 2022 los 300 profesionales en plantilla y espera llegar a los 500 a lo largo de este ejercicio. Así mismo, su objetivo para el presente ejercicio es superar los 130 millones de facturación.
Los últimos dos años han iniciado la diversificación en tecnologías. Su foco se centró inicialmente en la fotovoltaica, pero ahora ha entrado también en el desarrollo de grandes proyectos de almacenamiento a través de Elmya Energy. "Los parques de baterías son esenciales para garantizar la transición energética: se cargan cuando hay excedentes y están listos para cuando la eólica y la solar no producen; sirven así para balancear la red", alega Carlos Piñar, director de esta sociedad.
Fuente: ABC de Sevilla