El sector agroalimentario extremeño es el segundo más competitivo de España, supera un 10% la media española, como resultado de los bajos costes medios, los menores del país. Además, las exportaciones en Extremadura alcanzan los 1.166 millones de euros, el 2% de las exportaciones agroalimentarias españolas y 48,8 % del total de las exportaciones regionales, según datos del informe del Observatorio del Sector Agroalimentario español de Cajamar recogidos en el informe presentado por CESUR.
Por otro lado, el sector emplea en Extremadura a 71.414 personas, el 18,6 % del total de trabajadores de la región y el 3,2 % del sector agroalimentario español. Dentro del sector agroalimentario se reparten en 39.000 trabajadores en el sector primario (54%), 10.000 en la industria agroalimentaria (14,1%) y 23.000 en el sector comercializador (31,8%).
Estas son algunas de las conclusiones que se extraen del informe “Prospectiva estratégica para el sector agroalimentario extremeño y andaluz” que esta tarde ha presentado la Asociación de Empresarios del Sur de España, CESUR en Badajoz. El estudio ha sido promovido por la Comisión del Agroindustria de CESUR, y realizado por Escuela Técnica Superior de Ingeniería Agronómica y de Monte, ETSIAM, de la Universidad de Córdoba, en colaboración con la comisión.
El informe ha sido presentado en la jornada “Estrategias para afrontar los retos “imposibles” de las nuevas políticas agrarias” que ha presidido Juan Eloy Rodríguez, director general de Política Agraria Comunitaria de la Junta de Extremadura; y Fernando Seco, vicepresidente ejecutivo de CESUR. Ha sido presentado por el coordinador del informe, Pablo Lara, Dr. Ingeniero Agrónomo y Profesor Titular de ETSIAM.
La jornada ha contado con una mesa coloquio en la que han participado Juan Eloy Rodríguez, director general de Política Agraria Comunitaria; Lorenzo Ramos Moya, director del departamento agroalimentario de Cajalmendralejo; Antonio Maya, director gerente de Bodegas López Morenas; y Atanasio Naranjo, CEO de Tany Nature.
El director general de política agraria ha valorado el “interesantísimo” informe que se presenta en esta jornada y ha asegurado que la Junta de Extremadura es “muy consciente” de los desafíos que afronta el sector agrario extremeño. A este respecto, ha destacado que la Junta ha pagado el primer día posible, el pasado lunes 16 de octubre, el anticipo de la PAC en la forma en que permite el FEGA para que ese dinero esté en manos de quien lo necesita. Han sido 130,6 millones de euros de anticipo que han llegado a casi el 80 por ciento de los posibles perceptores.
No obstante, ha reiterado que la nueva PAC no satisface las necesidades del sector agrario extremeño y, por ello, ha exigido una revisión del Plan Estratégico Nacional en el 2024 porque no está diseñado para el modo de hacer tradicional de los agricultores y ganaderos de la región.
SOBRE EL INFORME
Esta prospectiva arroja datos como que Extremadura es la región líder en la producción de ovino y caprino con el 18,6% de la producción nacional, mientras que ocupa un papel destacado en la producción de ganado bovino con el 12,2%. Por su parte, las frutas ocupan un 4,5% y el aceite de oliva un 3,8%.
El estudio analiza los indicadores de rentabilidad y desvela que el Valor Añadido Bruto (VAB) de Extremadura supuso en 2020 el 4.21%, mientras que la relación con la renta agraria la contribución de Extremadura fue del 5%. Por ello, el VAB del sector agroalimentario de Extremadura alcanza los 2.840 millones de euros y supone el 16,3 % del VAB total de la región y el 2,9 % del VAB agroalimentario español. La contribución de la agricultura y la pesca al VAB agroalimentario representa el 56,2%, la industria agroalimentaria aporta el 19,8% y la comercialización el 24,1%.
El informe también aborda la necesaria flexibilidad sobre las exigencias del Pacto Verde Europeo, la petición de la regulación de las importaciones de países terceros a Europa, y cómo la gestión de los recursos hídricos marcará el futuro de nuestra agricultura, ganadería y alimentación. Además, el estudio señala la relevancia que juega la agroindustria en la España vaciada, el papel de la mujer en el campo y el problema del relevo generacional.
DATOS DEL INFORME
El informe “Prospectiva estratégica para el sector agroalimentario andaluz y extremeño” ofrece un amplio análisis del sur de España, sus riesgos y retos, además de señalar algunas actuaciones de futuro para tener éxito. Entre otros hitos, el estudio destaca:
· Los elevados estándares de calidad, seguridad alimentaria y respeto por el medioambiente y el bienestar animal de los productos agroalimentarios europeos afectan a la competitividad de los productores españoles, por sus altos costes respecto a importaciones de terceros. Situación que se ha agravado con el Pacto Verde y la Estrategia F2F, por lo que el sector agroalimentario ha solicitado insistentemente el establecimiento de cláusulas espejos para evitar esta pérdida de competitividad.
· Se pretende que la agricultura juegue un papel cada vez más acusado en la lucha contra el cambio climático, sobre todo mediante las técnicas de secuestro de carbono en el suelo. Sin embargo, para que esto sea viable se requieren esquemas de certificación sencillos que estén basados en prácticas concretas.
· Durante los últimos años, las encuestas han mostrado una mayor proporción de consumidores cada vez más proclives a un estilo de vida centrado en el bienestar, demandando alimentos saludables, seguros e incorporando atributos relacionados con el medio ambiente. Peso a ello, ante el nuevo contexto de inflación, el precio de los alimentos adquiere un papel cada vez más relevante en las preferencias de los consumidores.
· En España los factores que más influyen en las compras de los alimentos son la seguridad alimentaria (42%), seguida del coste (36%) y el sabor (33%).
· La Renta Agraria en 2022 descendió un 5,5% en términos nominales, situándose en 27.861 millones de euros y un -8,7% en términos reales. El incremento del 29,9% en los consumos intermedios ha impedido que los productores trasladen el impacto de este incremento a los precios de venta.
· Con respecto al indicador de Valor Añadido Neto (VAN) por unidad de trabajo (UTA), Extremadura supera la media española en algunas Orientaciones Técnico-Económicas (OTEs) ganaderas, vacuno de cría y carne, granívoros y ganadería mixta, y queda por detrás de la media europea en cereales, vitivinicultura, olivar y horticultura.
· En el caso del indicador Renta Neta, Extremadura vuelve a destacar en las OTEs ganaderas superando tanto la media española como la europea en Vacuno de cría y carne, Granívoros, Agricultura y Ganadería mixtas. Además, supera a la media europea en Otros cultivos anuales extensivos, Frutales, Cultivos permanentes combinados, Ovino caprino y otros herbívoros y Agricultura y ganadería mixta.