El grupo británico de trasporte National Express, propietario de nuestra asociada, la empresa asturiana Alsa, y su rival Stagecoach han llegado a un acuerdo de fusión con el objetivo de crear una empresa líder en Reino Unido, que los analistas valoran en unos 2.200 millones de euros. La operación de intercambio accionarial, propuesta el pasado mes de septiembre, se realizaría mediante un mecanismo judicial, previa aprobación de los accionistas, y las partes no descartan tener que acometer desinversiones de activos para conseguir la aprobación de la autoridad británica de la competencia.
Una vez realizada la operación el grupo resultante contaría con una flota de 40.000 autocares y autobuses y una plantilla de unas 70.000 personas. La nueva empresa estaría presidida por Ray O'Toole de Stagecoach, con Ignacio Garat, de National Express, como consejero delegado. Por su parte, Jorge Cosmen, actual vicepresidente de National Express y presidente de Alsa, ocupará la vicepresidencia en la empresa combinada y Chris Davies será el jefe financiero.
Según los términos ya anunciados, los accionistas de Stagecoach recibirían 0,36 nuevas acciones de National Express por cada una de las que poseen, lo que les daría la propiedad del 25% de la nueva compañía. Los accionistas de National Express retendrían un 75% de las acciones.
Para los analistas, esta ecuación de canje valoraría Stagecoach en cerca de 520 millones de euros, lo que supone una prima del 18% respecto a la valoración de sus títulos al cierre de la sesión del 20 de septiembre. National Express, que rechazó un acuerdo de fusión con su rival en 2009, calcula que el nuevo grupo permitirá un ahorro anual antes de impuestos de unos 52 millones de euros.
Debido a las duras consecuencias de la pandemia, que supuso una drástica caída de pasajeros, ambas empresas comenzaron a negociar la fusión. Según han anunciado la finalidad es crear «un negocio de transporte multimodal de pasajeros puntero en el Reino Unido, que tendrá como objetivo ofrecer un servicio magnífico a los clientes y avanzar hacia un futuro sin carbono con una nueva generación de autobuses y autocares sin emisiones».