Airbus "no verá mermada su carga de trabajo" en el FCAS, según asegura Defensa.
El Gobierno intenta atemperar el malestar de Airbus tras su decisión de elegir a Indra como coordinador en España del futuro caza de combate europeo, el FCAS. Su intención es asumir un papel protagonista en la asignación de cargas de trabajo y buscar la mayor cooperación entre Airbus e Indra, sin retirar a esta última su condición de gestor del programa.
Éste es el mensaje que ha transmitido el secretario de Estado de Defensa en funciones, Ángel Olivares, al presidente de la patronal andaluza Cesur, Fernando Seco, en una carta a la que ha tenido acceso EXPANSIÓN. La misiva llega en un momento de máxima tensión en las relaciones entre el Gobierno español y Airbus, que por primera vez no dirigirá en España un gran programa aeronáutico.
Defensa quiere "que exista la mayor colaboración entre las dos empresas de referencia, Airbus e Indra, para que lleguen a acuerdos que permitan una participación ordenada y eficiente de la industria española". Para ello, desarrollará una "política abierta y transparente" que permita "aunar esfuerzos", señala.
También va a diseñar un plan para el FCAS en el que se fije la carga de trabajo de cada empresa en función de su "capacidad tecnológica, eficiencia y experiencia". Asegura que "necesitamos todas las capacidades y voluntades" de Airbus, que "en ningún momento verá mermada su carga de trabajo en este proyecto".
Visita de Faury
Olivares envía la carta mientras el presidente ejecutivo de Airbus, Guillaume Faury, visita España. En su primer viaje oficial al país desde que en abril relevara a Tom Enders en el cargo, Faury está visitando las fábricas de la empresa y también manteniendo contactos al más alto nivel. Ayer, se reunió con la ministra de Defensa en funciones, Margarita Robles, para trasladarle de primera mano la preocupación sobre el FCAS, y también visitó La Moncloa. A media tarde, tuvo un encuentro en La Zarzuela con Felipe VI.
Airbus publicó además ayer sus previsiones sobre la evolución del mercado de la aviación comercial en los próximos 20 años. Calcula que la demanda global ascenderá a 39.210 aeronaves, lo que supone una revisión al alza respecto a las cifras publicadas hace un año. Confía en que el mercado crezca a tasas anuales del 4%, a pesar de la incertidumbre por las tensiones arancelarias. La flota mundial pasará de 23.000 aviones ahora a 48.000 en 2038. Se necesitarán 550.000 nuevos pilotos y 640.000 técnicos.
Fuente: Expansión